El concejal Ricardo Garramuño participó de la audiencia pública que se llevó a cabo ayer en el Concejo Deliberante de Ushuaia, donde un grupo de vecinos pudo opinar sobre el préstamo de $100 millones solicitado por el municipio para ejecutar obra pública.

El edil del MoPoF se manifestó en contra de la adquisición del préstamo y lo calificó de “un cheque en blanco” para el municipio.

Además, denunció agravios de parte del secretario de gobierno del municipio, Pablo García, quien también participó de la audiencia pública de ayer, junto a otros funcionarios municipales.

Según Garramuño, cuando le tocaba exponer su punto de vista sobre la cuestión, “el secretario de gobierno estaba en la zona de las sillas y se escuchaba desde el fondo que me decía calláte pendejo”.

“Al no pedir la palabra, el único micrófono habilitado es el del presidente del cuerpo, Juan Carlos Pino”, dijo Garramuño por FM Aire Libre.

El cuerpo legislativo de Ushuaia ya había aprobado la adquisición del préstamo en primera lectura, para luego ser analizado en la audiencia pública que tuvo lugar ayer.

El presidente del Concejo, Juan Carlos Pino, había adelantado que “la compra de maquinaria para solucionar los problemas de asfalto que tiene la ciudad es una oportunidad única de la que no se los puede privar a los vecinos”.

Según Pino, “esta ciudad nunca tuvo una planta de asfalto propia, hoy los pozos se tapan con tierra, a la ciudad le falta asfalto el barrio Ecológico hace 30 años, al igual que todos los barrios de la ciudad”.

“Últimamente uno escucha que tienen que tapar con tierra si no sale la fábrica de asfalto, pero están desviando la atención. Todos quieren que las calles estén impecables, pero se puede hacer una proyección y una planificación”, aseguró Garramuño.

Y afirmó que “el Concejo es una casa democrática se buscan los consensos y debates. Si usan la prepotencia como lo hicieron ayer, es triste”.