Los ministros de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, y de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, anunciaron este martes la creación de seis Centros Regionales de Investigación Aplicada a la Gestión de Áreas Protegidas, que estarán emplazados en los parques nacionales El Impenetrable (Chaco), Calilegua (Jujuy), Pre-Delta (Entre Ríos), Tierra del Fuego, Los Glaciares (Santa Cruz) y Nahuel Huapi (Río Negro y Neuquén).
El primer instituto a construir estará ubicado en el Parque Nacional Pre-Delta, donde se promoverá y coordinará la realización de estudios y actividades científicas aplicadas al humedal del Delta del río Paraná, contará con una inversión de 163 millones de pesos, albergará hasta 20 investigadores y contará con una arquitectura bioclimática y con accesibilidad, según se informó oficialmente.
Cabandié destacó el acompañamiento del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación en “temas tan importantes como lo son la temática del cambio climático y ambiente” y también la inversión que se realizará para la construcción de los centros de investigación, que contará con un préstamo del Banco Desarrollo América Latina (CAF).
“El mundo está buscando que tengamos mayor áreas protegidas y Argentina está en un buen nivel con respecto a esto. De hecho, durante estos dos años y medio de gestión creamos tres Parques Nacionales y estamos próximos a que se vote en el Congreso de la Nación la creación de dos más”, indicó Cabandié y puso como ejemplo el caso de la provincia de Catamarca donde se está trabajando para la creación de un área protegida de carácter nacional.
Filmus, en tanto, remarcó que es “fundamental” la preservación de los Parques Nacionales y sostuvo que la ciencia tiene mucho para aportar, al tiempo que subrayó que el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) tiene un área específica que se dedica al tema.
¿Qué funciones tendrán los centros regionales?
Los centros regionales constituirán espacios de trabajo interdisciplinario que, en base a las prioridades de investigación determinadas por las Áreas Protegidas, desarrollarán estrategias de investigación e información orientada a fomentar las capacidades locales, potenciando la experiencia y experticia de las instituciones científico-técnicas y promoviendo el encuentro entre los diferentes saberes que se desarrollan en los distintos territorios.
Serán construcciones modernas, que contemplarán el uso de materias primas locales y el impacto ambiental, con la capacidad de albergar hasta 20 profesionales en simultáneo, y dispondrán dormitorios para los investigadores, cocina, espacios de trabajo y procesamiento de muestras, y salas para reuniones o conferencias, precisaron.
“Los científicos tendrán permanencia en el lugar para poder tomar muestras, para sistematizar datos, teniendo disponible laboratorios”, remarcó Cabandié.



