El Concejo Deliberante de Ushuaia aprobó por unanimidad con la creación del “Programa de Respeto a los Equinos”. Además de admitir esa capacidad de sentir de los animales, el nuevo edicto establece una serie de criterios para garantizarles el “bienestar, salud y protección”. La norma, además, busca manera de “generar acciones frente a la problemática de los caballos sueltos en la vía pública, el maltrato y abandono”.
La iniciativa, impulsada por la presidenta de ARAF incorporó aspectos de otros proyectos de los concejales Gabriel De la Vega (FpV) y Mariana Oviedo (MPF), un trabajo que llevó varias instancias hasta lograr superar el ámbito de las comisiones y ser llevado a Debate Ciudadano, para finalmente lograr la sanción definitiva por unanimidad en la última sesión.
Según establece la nueva normativa, se creará el Centro de Rescate y Rehabilitación Equino Ushuaia (CRREU) en un predio municipal donde será imprescindible que haya veterinarios. Este espacio estará destinado a los caballos rescatados que requieran asistencia. “Según la norma, el Municipio deberá contar con un predio destinado a la labor de un grupo capacitado en captura y rescate, internación y traslado animal”, aseguraron voceros del Concejo Deliberante austral a Infobae.
También, se capacitará y concientizará a todo el personal municipal y a los tutores responsables de los caballos sobre los cuidados higiénicos-sanitarios (vacunación, desparasitación, chequeos periódicos, espacio acorde a sus necesidades, derecho animal, entre otros puntos), sobre el Registro de Identificación Equina (RIE) para tener la posibilidad de consultar datos en caso que falte información sobre el responsable del animal o si el equino llegara a ser decomisado para darlo en adopción a una persona responsable, con seguimiento del caso.
El documento que acompañó el proyecto insta a reconocer “los derechos de los equinos como seres sintientes, que deben ser tratados con respeto y consideración”, por lo que prohíbe el uso de métodos “crueles o inhumanos en el entrenamiento, monta o utilización de caballos”.
“Se controlará los espectáculos con animales a los efectos de evitar que se les infringiere malos tratos o hiciere víctima de actos de crueldad; que no sean tratados con dignidad y consideración; que sean sometidos a prácticas violentas o forzadas que le generan angustia”; y llevará un registro de las personas que eduquen equinos a los efectos de “controlar que los métodos y técnicas utilizados en el amanse del animal no sean violentas”, indica al respecto la ordenanza.
A ello, suma implementar programas de concientización y educación sobre el bienestar y la protección de los equinos, dirigidos a los cuidadores, propietarios y comunidad en general e incluye definiciones sobre la protección de los derechos de estos animales: “Reconocerlos como ‘seres sintientes’, que deben ser tratados con respeto y consideración; fomentar la adopción y el rescate de equinos que se encuentran en situación de abandono o maltrato, promoviendo su rehabilitación y adopción responsable, entre otros puntos”.