La Convención Reformadora finalizó su tarea el viernes pasado y la provincia de Santa Fe tiene una nueva Constitución, después de 63 años. El acto de jura, desarrollado en la explanada de la Legislatura provincial, cerró formalmente un trabajo de dos meses, donde se reformaron 42 artículos y se incorporaron otros 46.

El nuevo texto constitucional habilita la reelección del gobernador, a la vez que limita mandatos y fueros. También, elimina la mayoría automática en Diputados e introduce una serie de reformas en la estructura del Poder Judicial, muchas de ellas cuestionadas por la oposición. Además, se votó un nuevo régimen municipal que contempla la autonomía y se introducen nuevos derechos para los santafesinos.

Unidos, el frente oficialista que responde a Maximiliano Pullaro, contó con el acompañamiento crítico del peronismo en la introducción de cambios sensibles, que le aportaron legitimidad a la reforma. Así, el gobernador santafesino se anota una nueva victoria política, mientras suma al armado nacional de Provincias Unidas que se posiciona como una alternativa de centro en la polarización mileísmo y kirchnerismo-peronismo.

En el extremo sur del país, el gobernador de Tierra del Fuego AIAS, Gustavo Melella, continúa a la espera de la conformación de la Convención Constituyente, que se encargará de la Reforma de la Constitución provincial, luego de que la Reforma haya pasado por la Justicia para quedar finalmente autorizada.

En el nuevo texto provincial, a diferencia de la constitución renovada de Santa Fe, el gobernador fueguino podría ser electo por tercera vez, tal era la crítica que se dejó saber por los sectores opositores a la actual gestión.