Leonardo Perez Bustos, titular de la consultora NeoDelfos, de Río Grande, analizó el resultado electoral nacional y provincial. Mientras desde los espacios ganadores y aún desde los perdedores, se intenta buscar una explicación al triunfo oficialista, en un escenario para él, adverso.
Las suposiciones han pasado de moda. En política, también lo sólido, se desvanece en el aire. Tal es así que las encuestas ya perdieron su peso. Nada es lo que parece y mucho menos hay alguna certeza.
Desde NeoDelfos, antes de las elecciones del domingo pasado, tampoco se habían arriesgado a emitir un pronóstico, pero sí un diagnóstico de una situación son final abierto.
Y dijeron que para analizar el resultado de antes de ayer había que remontarse al resultado del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires, donde el peronismo le ganó por 15 puntos al partido de ultraderecha La Libertad Avanza.
“Allí comenzó una presión sobre el dólar, con la caída de los mercados, y una fuerte caída de los títulos de la bolsa de valores argentinos”, explicó Perez Bustos por FM Del Pueblo.
La semana siguiente, el 14 de septiembre, el resultado de esa elección comenzaba a manifestarse en la micro economía, en los precios, y en los hogares. El miedo a otro terremoto de la economía empezaba a genera incertidumbre sobre lo que iba a venir.
“Gran parte de la sociedad argentina le da la derecha a este gobierno es por el hecho de haber desacelerado la inflación”, dijo el consultor. Hasta que Milei se jugó su carta fuerte dos semanas previas a la elección reciente, acudiendo al agente externo, el gobierno de los Estados Unidos, que tuvo un mensaje categórico de ayuda a la Argentina, aunque con condicionamientos: o Miel o el caos económico.
“Con un potencial desbande, recurrió a un agente externo, y eso contribuyó y explica el resultado electoral del domingo”, afirmó.
Y subrayó que “esta ola violeta que terminó tapando gran parte del país, no significa que sea una respuesta estable, sigue siendo volátil, no es un cheque en blanco al presidente, es una respuesta a una coyuntura que se presentó, y es ni más ni menos que eso, el miedo a incertidumbre económica”.
“Quienes están leyendo esta elección como que a partir de ahora el país cambió, me parece que están viendo una película totalmente distinta”, analizó Perez Bustos.
La interpretación concluye con un factor decisivo en la elección, que fue la intervención de Trump, que le otorgó una calma en cuanto a la presión sobre el dólar. “Esto animó y ayudó a pensar, ante el riesgo de un retorno al pasado, y la imprevisibilidad de la economía. (…) El que trate de leer esta elección como que ganó un actor local, no tiene relación con la realidad”, advirtió Perez Bustos.
Desde la fuerza ganadora por supuesto que hubo festejo, pero la teoría de NeoDelfos da por tierra con la interpretación del senador electo Agustín Coto. “Tierra del Fuego dejó de ser peronista”, se apuró a decir Agustín.
Pero para Perez Bustos, “hay un montón de lugares donde el peronismo fue unido, y la ola violeta lo pasó por arriba”.



