El polémico proyecto de Reforma Laboral del Gobierno de Javier Milei incorpora un conjunto de cambios impositivos. Según sus autores, busca incentivar la actividad económica del sector privado y facilitar la inversión.

En el rubro de impuestos internos, el texto legal elimina la imposición que aplicaba a productos electrónicos como celulares y otros dispositivos, así como a automotores, motos, aeronaves, embarcaciones y objetos considerados suntuarios. La medida alcanza también a otros bienes y servicios: seguros, espectáculos cinematográficos, videogramas grabados, telefonía celular, comunicación audiovisual y alquileres con destino a vivienda que no impliquen locación múltiple.

El Gobierno incluye en la propuesta la eliminación de estos tributos, pero la información provista no presenta un análisis específico sobre cómo afectará a fabricantes, importadores, comercializadores o consumidores finales.