En el marco de un jornada histórica para la democracia Argentina, con 38 votos a favor y 29 votos en contra, el proyecto de la Interrupción Voluntaria del Embarazo fue aprobado por la Cámara Alta y se convirtió en ley a las 4.12 horas del 30 de diciembre del 2020.

“Se convierte en ley”, cerró la sesión la Presidenta de la Cámara, Cristina Fernández de Kirchner, poniendo en palabras la concreción de una lucha histórica y la conquista de uno de los movimientos políticos más importantes de este siglo: los feminismos.

Ante la mirada de miles de personas que se hicieron presentes en el Congreso y el aguante de otras millones que siguieron expectantes el minuto a minuto desde sus hogares de todo el país, la ley enviada por el Poder Ejecutivo Nacional es una realidad desde el día de la fecha. Un día que sin lugar a dudas será inolvidable en la memoria de los y las argentinas.

Impulsada por los movimientos feministas de Argentina y la región, el tratamiento de esta ley, promesa de campaña del gobierno de Alberto Fernández, fue demorada por el avance de pandemia del coronavirus que dilató su debate al punto de que la votación se cerró faltando solo un día para terminar este caótico año 2020.

Tras 12 horas de sesión y con el tablero marcando la aprobación del proyecto, el recinto se convirtió en una fiesta y los aplausos y los pañuelos verdes flamearon desde las bancas de quienes sumaron su voto a favor de la ampliación de derechos de las mujeres y las personas gestantes que marcará un precedente a nivel nacional y regional. Sos

Los festejos en las calles tomaron las ciudades y la marea verde dijo presente por segunda vez este año, luego de que la ley obtuviera media sanción en la Cámara de Diputados el pasado 11 de diciembre y diera el primer paso a concretar un reclamo que ya no podía esperar más.

Vale recordar que La Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito empuja y milita desde el 2005 la aprobación de esta ley bajo el lema: “Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir”.

El conteo de votos inclinó la balanza a favor de la aprobación desde las primera horas del debate. Es que el Poder Ejecutivo y los altos mandos del Gobierno Nacional dejaron en claro entre los Senadores el interés por la aprobación del proyecto, lo que contribuyó a que varios indecisos terminarán de decidir su voto a favor.

En ese sentido, las piezas claves fueron las senadoras y el senador hasta ayer indefinidos: Stella Olalla, Juntos por el Cambio, Lucila Crexell, Movimiento Popular Neuquino y Alberto Weretilneck, Juntos Somos, quienes finalmente votaron a favor sumando su apoyo a la iniciativa enviada por el presidente Alberto Fernández.

Sergio Leavy, del Frente de Todos y Silvina García Larraburu, del Frente para la Victoria rionegrino también tuvieron una participación clave al cambiar su postura respecto a sus votaciones en 2018, que habían votado en contra de la norma cuando se desempeñaban como diputado y senadora, respectivamente.

La emoción y la alegría popular es incontrolable. Uno de los reclamos emblemáticos de “la revolución de las hijas”, que empezó como un deseo imposible, se convirtió en una realidad imparable. Desde hoy, abortar es legal, seguro y gratuito en Argentina. A la clandestinidad, no volvemos nunca más.

Fuente: Filo news