Los bloques políticos del Frente de Todos (FdT) y de Juntos por el Cambio (JxC) del Senado acordaron elaborar una declaración conjunta de rechazo a la resolución del Gobierno de Chile, de fijar un nuevo límite que avanza sobre una zona de la plataforma marítima en el Atlántico sur que forma parte de la Argentina.

Durante una reunión de la comisión de Relaciones Exteriores, en la que el canciller Felipe Solá declaró que la única vía para resolver la controversia es la negociación con el vecino país y les reclamó a los legisladores de la oposición que dejen de ser espectadores y definan qué país tiene razón en la discusión, los senadores de ambos espacios políticos respaldaron la redacción de una declaración unánime de rechazo al decreto del presidente chileno, Sebastián Piñera, que será aprobada en la próxima sesión del Senado.

El texto comenzó a ser firmado en las últimas horas tras el acuerdo alcanzado ayer por las bancadas políticas y la Cancillería argentina al término de una reunión de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado.

El escrito difundido hoy por fuentes parlamentarias del oficialismo expresa el “más enérgico rechazo” del Senado de la Nación a la “pretensión del gobierno de la República de Chile de extender su plataforma continental”.

También califica a la norma como una “violación al Tratado de Paz y Amistad celebrado con la Argentina en 1984”, que desconoce “la demarcación del límite exterior de la plataforma continental”, de conformidad con “la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar”.

Los senadores ratifican “su más firme respaldo al trabajo realizado por el Estado Argentino a través de la Comisión Nacional del Límite Exterior de la Plataforma Continental (COPLA), el cual se ajusta” al tratado firmado entre los presidentes Raúl Alfonsín y Augusto Pinochet en 1984.

El tratado fue “reflejado en la Ley Nacional 27.557, aprobada por unanimidad en ambas Cámaras del Congreso de la Nación el 4 de agosto de 2020 y promulgada por el Poder ejecutivo el 24 de agosto del mismo año”.

El proyecto también rechaza “el intento de apropiación por parte de Chile de una extensa área de los fondos marinos y oceánicos, espacio que forma parte del Patrimonio Común de la Humanidad de conformidad con la CONVEMAR y del Tratado de Paz y Amistad”.

Finalmente, reafirma su “adhesión a lo expresado por la Cancillería Argentina en respuesta a la pretensión del Gobierno de Chile en cuanto a que la misma no es aceptable para la República Argentina y plantea una situación que corresponderá resolver a través del diálogo en defensa de los derechos argentinos, de acuerdo a la hermandad de nuestros pueblos y el derecho internacional”.