El Instituto Provincial de Vivienda y Hábitat de Tierra del Fuego es parte de un proyecto en el que se construirán un total de 128 unidades habitacionales en seis regiones bioclimáticas de todo el país, una de ellas es la ciudad e Ushuaia, en el barrio Río Pipo.

La construcción de estas viviendas denominadas autosustentables tiene el objetivo de reducir tanto el consumo de energía las emisiones de dióxido de carbono. Por tal motivo tienen un diseño arquitectónico particular en el que se utilizan materiales eficientes y se incorporan sistemas de energías renovables.

Las familias que forman parte del proceso son capacitadas en el sistema, ya que se realizará un seguimiento del funcionamiento de estas casas, que tienen posibilidad de ampliación a futuro, pero bajo estricto seguimiento.

La presidenta del Instituto Provincial de Vivienda y Hábitat, Leticia Hernández, dijo que “la casa es una planta compacta, con aberturas orientadas al norte y una medida especial. Además se utilizan materiales que conservan la temperatura y cuenta con energías renovables”.

“Tienen una tipología de muro distinta, paneles que absorben energía; además del diseño, es una planta muy compacta y está pensada para la ampliación. Habrá un momento en el que las familias deberán involucrarse, en la segunda etapa. Es fundamental que las pantallas y las aberturas se abran al norte, para captar más energía solar”, detalló Hernández por Radio Nacional Ushuaia.

Sobre los beneficiarios, Hernández contó que “la gente del área técnica manifestó que ya habían sido seleccionadas las familias, porque era un requisito principal a la hora de presentar la documentación técnica. Pero hoy debemos revisar el listado, por si alguna ya tiene viviendas asignadas. Es gente que debe saber que tendrá un seguimiento de tres años, porque estos sistemas son especiales. Quienes serán adjudicatarios tienen que tener una capacitación”.

Asimismo, la Presidenta del IPVyH destacó que, desde Nación “al ver nuestro compromiso, también nos plantean y nos ayudan en otros proyectos. En Río Grande quedó seleccionado uno para la Margen Sur. Nosotros creemos que estamos en un buen camino en esto”.

En cuanto a los plazos, expuso que “es de aproximadamente un año, comúnmente la veda invernal es nuestro inconveniente. Por ahí tenemos buenos inviernos o malos inviernos. La gente sigue en la curva de trabajo. Ellos están recubriendo, porque el sistema es seco, con paneles. Creemos que no vamos a pedir prórroga”.