El convencional constituyente por Juntos por el Cambio, Ramiro Requejado, habló sobre el avance en la reforma de la Carta Orgánica y dijo que “será una herramienta de la democracia de la ciudad que se usará sólo si es necesario”.

“Un ballotage cada 4 años puede llegar a salir más barato que lo que sale un concejal por año”, dijo Requejado por Radio Nacional Ushuaia.

Y advirtió que “hace 20 años, a plata de hoy el Concejo Deliberante costaba 180 millones de pesos, hoy cuesta 4 veces más y sesiona mucho menos. Hubo un aumento de la planta del 270%. Estamos aumentando de forma desproporcionada la cantidad de concejales. La gran deuda de esta Convención Constituyente es controlar y disminuir el gasto político”.

Respecto a las utilidades del balotaje, Requejado recordó que “el Intendente en la última elección ganó con el 54% de los votos, es incuestionable. Pero la elección anterior se ganó con el 21%. Nosotros proponemos una figura del balotaje, pero hay un montón más de propuestas. No nos aferramos a “la nuestra o nada”. Es para el caso que se necesite en una elección. Una persona que gana con el 21% de los votos no fue electa por más del 75% de la población. Es una herramienta para cuando se la necesite”.

“Somos una democracia joven, estamos aprendiendo. En la elección de los convencionales la gente votó 7 espacios distintos. Para el cargo de un Ejecutivo, se tendrá una herramienta. Estamos aprendiendo a votar”, continuó.

Asimismo, resaltó que “cuatro espacios políticos propusieron el ballotage. No hay que entrar en especulaciones que no son sanas. No vinimos a trabajar una Carta Orgánica para la coyuntura, ni para quienes están hoy, ni para los partidos políticos. Trabajamos para los próximos 30 o 40 años. No nos podemos quedar, porque no seríamos consecuentes con todo lo que hacemos”.

Consultado por su continuidad en la política, Requejado señaló que está “muy agradecido por el espacio. Seguramente voy a seguir estando. Sólo sé que el 13 tengo que arreglar los desórdenes de mi vida de antes, porque han sido días muy largos. Con el nivel de actividad que tengo el orden es fundamental. Lo que puedo asegurar es que no digo ‘acá no me meto ni a palo’. Probablemente pueda seguir, del lado que me toque”.

Además, aseguró que –junto a su par, Myriam Canga- “estamos muy conformes. Hemos sido parte de ordenar lo que hacía falta y sostener el espíritu al que no había que hacerle modificaciones profundas. En nuestro espacio, desde el que somos opositores, hemos sido sumamente responsables para buscar consensos para que las cosas se hagan bien. Entendimos que a veces hay que dejar de lado los egos. Defendimos nuestras posturas con respeto cuando entendíamos que lo que se planteaba no era correcto”.

Por último, dijo que en esta “nueva etapa” de su vida se lleva “las cosas que a mí me hacen como persona: dignidad, trabajo, respeto. Creo que cuando lo pongo en la balanza, en una primera etapa, estoy muy conforme”.