El juez Javier De Gamas Soler pidió ayer su jubilación, mientras su situación procesal estaba agravada debido a que la Cámara Federal le rechazó un “recurso extraordinario” por presunto encubrimiento del atentado contra la AMIA, y ratificó que ese hecho fue de “lesa humanidad”.

Antes del aniversario del atentado a la AMIA, trascendió que De Gamas estaba procesado, no indagado, y en una etapa avanzada del proceso de investigación, en una causa que lleva décadas.

Ayer, cuando pidió la jubilación a su cargo de titular del Juzgado de instrucción nº 1 del Distrito Judicial Sur, desde la misma Justicia se pidió que se abra el proceso de enjuiciamiento para evaluar supuestos delitos del juez, junto con el pedido de que se lo suspenda en el cargo preventivamente.

Con la probabilidad que haya cometido esos hechos, también se pidió que se suspenda el tramite jubilatorio hasta que se resuelva el proceso, con una de las causales correspondientes por el delito de su actuación en la causa AMIA, por la que está procesado.

El otro hecho es que, según información de la AFIP, el juez De Gamas estaría inscripto como Monotributista para actividades privadas, que tienen que ver con alquiler de propiedades, lo que está vedado a los jueces, porque no puede hacer otra actividad remunerada que no sea la docencia.

Ahora el Consejo de la Magistratura deberá correr el traslado al magistrado para que se defienda.