En los últimos días trascendió que la jueza Federal de Río Grande, Mariel Borruto “no recibe a ex combatientes”, que forman parte de la voluminosa causa por supuestos delitos de lesa humanidad, durante la guerra de Malvinas.

Una de las cinco querellas con las que cuenta dicha causa envió una nota por escrito al Juzgado Federal, indicando que iba a visitar a la jueza “el jueves 20 de abril, a las 11 de la mañana”.

Pero dentro de la normativa que se maneja en la Justicia, no está previsto que los jueces se reúnan con una sola de las partes, y no con las otras. Para esas instancias existen abogados querellantes, defensores, o fiscales.

Otro de los motivos es que la nota “tampoco decía qué es lo que quiere”, dijo el Secretario del Juzgado Federal de Río Grande, Manuel Vicente, por FM Del Pueblo.

“No se sabe a ciencia cierta las intenciones de esa querella, que en 2021 pidió estar presente en una testimonial”, agregó.

El pedido no se ajustaría a derecho. Desde mayo de 2021 cuando salió el fallo de casación, según el cual esos delitos ya estaban prescriptos, el Juzgado suspendió las indagatorias fijadas y ninguna de las partes cuestionó el hecho. Sin embargo, desde el mismo Juzgado continuó la investigación, que sumó más de 1500 fojas nuevas, ocho tomos más a la causa.

“A quien hay que ir a reclamar y pedir audiencias es a la Corte Suprema de la Nación, que es quien tiene que resolver, y continúe”, advirtió Vicente.

Ahora, la causa está en la Corte Suprema de Justicia, debido a un recurso federal, y las querellas pidieron que la Corte se expida en diciembre de 2021 y a la fecha no hay resolución.

“No sé por qué esta querella elige buscar como enemigo dentro de la causa a la única jueza que ha indagado y ha presentado imputados dentro de la causa, es algo que no se comprende. Este nivel de agresión para con la Jueza me supera, no sé por qué tienen que viajar 3000 km para resolver algo que se resuelve en la Corte Suprema de Justicia de Buenos Aires”, concluyó Vicente.