Dos consultoras especializadas en finanzas provinciales midieron en las últimas horas cuál fue el alcance de la “motosierra” sobre el renglón del gasto que refiere a las transferencias no automáticas desde Nación hacia los gobernadores. Politikón Chaco estimó que las transferencias no automáticas totalizaron $68.160 millones, lo que implica una caída en términos reales del 81,8 por ciento.

Al mirar el panorama del primer cuatrimestre completo, la consultora que dirige Alejandro Pegoraro calculó que sumaron en total $276.324 millones en etapa devengada y $144.438 millones en etapa pagada. Dichas cifras equivalen a una baja real de -76,7% y -84,2% respectivamente”, mencionó. En ese sentido, indicó que con esos números el primer cuatrimestre del 2024 tuvo “las transferencias más bajas desde 2016 a la fecha”.

Algunas provincias experimentaron recortes superiores al 90% en los primeros cuatro meses del año. La Pampa, La Rioja y San Luis, por ejemplo, sufrieron un ajuste de 98,9% de las transferencias discrecionales recibidas. Le siguió Córdoba con 98%, Formosa con 97,5%, San Juan con 97,1%, Tierra del Fuego con 95,7%, Entre Ríos con 95,6%, Chaco con 94,9% y Catamarca con 94,7 por ciento. Un desplome casi total.

En el otro extremo, la única que tuvo una variación negativa pero menor fue la Ciudad de Buenos Aires, con 11,2% seguido de Santa Cruz, con un retroceso de 51,9 por ciento. Un componente central en los envíos no automáticos a la CABA es el dinero destinado al funcionamiento de Hospital Garrahan. Para la provincia patagónica influyó el giro de fondos para el Hospital de Alta Complejidad SAMIC en El Calafate.