El Presidente del Concejo Deliberante de Río Grande criticó el servicio de salud mental que se brinda en el hospital regional, y dijo que “no se puede estar otorgando un turno a dos o tres meses, cuando se tiene por objeto proteger los derechos humanos de los usuarios de los servicios de salud mental”.

Y se puso a disposición de las autoridades de Salud “para ver de qué manera nos podemos organizar todos los poderes del Estado para darle una solución definitiva a este flagelo que es el suicido, que nos toca vivir en el día a día, y que en todas las ocasiones tiene que ver con cuestiones de salud mental”.

“En el 2019 el entonces intendente Gustavo Melella vetó un proyecto de mi autoría que fue aprobado por los ediles como fue la coordinación municipal para la prevención del suicidio, pero más allá de ese caso en particular, hay que seguir trabajando, y poniendo un esfuerzo grande en esto, y más allá de que no sea un área de mi competencia, me pongo a disposición de las autoridades de Salud para ver de qué manera nos podemos organizar todos los poderes del Estado para darle una solución definitiva a este flagelo que es el suicido, que nos toca vivir en el día a día, y que en todas las ocasiones tiene que ver con cuestiones de salud mental”, advirtió.

“Continuamente recibo mensajes de los vecinos reclamando que en el hospital no hay turnos, que no se pueden atender, donde hay gente que hace meses que está esperando por un turno, o le dan turno para dentro de dos o tres meses, la verdad que la salud mental no puede esperar tanto tiempo, y por eso suceden las cosas que después nos toca vivir”, aseguró.

“Con la nueva Ley de Salud Mental Nº 26657, al no cumplirse de manera adecuada, trajo más problemas que resultados, es un tema a rever, por lo que me pondré en contacto con diputados y senadores nacionales para ver cómo podemos revertir esta situación”, concluyó.